Viva el pueblo colombiano

La Mesa Ampliada Nacional Estudiantil (MANE) de Colombia denunció que el joven muerto el jueves durante una de las marchas de protestas fue asesinado, por lo que no se trató de un accidente como lo indicaron las autoridades.
Se trata del estudiante Yan Farid Cheng Lugo, quien murió en Cali, Valle del Cauca, como consecuencia de la activación de un artefacto explosivo, hecho que las autoridades atribuyeron a un presunto accidente.
Contrario a esa afirmación, en un comunicado la MANE detalla que durante las movilizaciones en la capital vallecaucana, con la participación de más de 15 mil educandos, se presentó una fuerte explosión producto de un artefacto que desconocidos arrojaron desde un puente, reseñó Prensa Latina.
Este, agrega, estalla a la medida de la cintura del joven, estudiante de cuarto semestre de medicina de la Universidad Santiago de Cali, destrozándole la pierna derecha y la parte baja del abdomen, lo que le causó la muerte inmediata. El artefacto hirió a otras 10 personas. La MANE sostiene que ese hecho se enmarca en una estrategia de estigmatización, amedrentamiento y persecución del movimiento estudiantil, que tiene como objetivo fundamental alejar a los estudiantes del conjunto de la sociedad colombiana.
“Hemos denunciado y comprobado en reiteradas ocasiones que agentes del Estado infiltran nuestras acciones con el fin de legitimar la represión y el asesinato de estudiantes, razón por la cual exigimos al Estado, aclare su participación en estos hechos que enlutan hoy al movimiento estudiantil”, subraya el texto.
Por otra parte, los estudiantes exigen al Gobierno, en cabeza del presidente Juan Manuel Santos, que respete el derecho a la vida, la integridad y la protesta de los educandos.
También piden claridad en los hechos que provocaron la muerte del estudiante y garantías reales para que el movimiento estudiantil pueda movilizarse, crear y soñar.
“Por nuestros muertos ni un minuto de silencio, toda una vida de lucha y combate”, concluye el comunicado.
La víspera miles de estudiantes de las universidades públicas y privadas salieron a las calles de las principales ciudades de Colombia, en protesta por una reforma a la educación que impulsa el Gobierno, dando inicio así a un paro nacional